Julieta Díaz y Adrián Galia, a puro flamenco en el Teatro Astral
El bailarín Adrián Galia presenta "Gigantes del flamenco", el próximo 5 y 6 de noviembre en el teatro Astral, donde la actriz participará de un homenaje en vida a su maestra de danza, "La China".
Reconocido como uno de los mejores bailaores flamencos contemporáneos, Galia exhibe la curiosidad de ser argentino, aunque desde muy chico comenzó a girar por el mundo junto a sus padres bailarines. Años de entrenamiento y transmisión familiar, hicieron de él un artista de reconocimiento internacional que compartió escenarios con Peter Shaufuss, Silvie Guillén, Maya Plisetskaya, Patrick Dupont, Julio Bocca, Vladimir Vasiliev, Makarova y Cristina Hoyos, entre otros exitosos artistas.
"Este espectáculo sube a escena a tres generaciones de bailaoras y bailaores, máximos exponentes del género, y representa una borrachera de poesía danzada", explica Galia, para quien poesía y danza mantienen un diálogo permanente, tanto en la vida como sobre el escenario.
El hombre, considerado un maestro por sus pares, dedicará los dos shows del Astral a brindar un homenaje personal y profesional a su madre. "Rendimos este homenaje vivo a Olga María Marcioni, "La China", maestra de maestros y con una trayectoria internacional impecable, por su personalidad arrasadora y porque su público se merece volver a sentirla en escena", subraya el bailarín que recuerda los años en que su madre se dedicó a realizar entrenamientos en Argentina tras su retiro de las tablas, ocasión en que conoció, como discípula y amiga, a la actriz Julieta Díaz.
"Es un honor para mí que me hayan convocado para este homenaje a esta mujer que, además, es la madre de Adrián, y por participar de un espectáculo de este bailarín que fue el único que reemplazó a Antonio Gades después de su muerte", señala Díaz en medio del ensayo. Y se apresura a aclarar que "no voy a bailar, aunque al final seguramente formaré parte". La invitación a Díaz consistió en que recite dos poemas de Federico García Lorca, mientras "La China" baila esa palabra hablada.
"Ya estoy llorando, es una emoción enorme", expresa Marcioni ante la idea del homenaje y por la posibilidad del reencuentro con gran parte de sus alumnos porteños y argentinos.
"Bailamos, tocamos y cantamos con el único objetivo de conmover al espectador deseoso de oír, ver, oler, degustar y tocar el flamenco con los cinco sentidos", reflexiona el prestigioso bailarín que, tras las funciones en Buenos Aires, presentará su espectáculo en la ciudad de Mendoza.
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