La lengua de lava que sigue caminando hacia el mar en la isla de La Palma se tragó ayer por la noche en su lento avance -200 metros por hora- parte de la localidad de Todoque. La colada está ahora en el centro del pueblo y se confía en que funcione el trabajo desarrollado ayer por la noche con palas para crear una especie de cauce que cambie su curso y lo desvíe hacia la izquierda, donde hay menos viviendas.
Ayer por la mañana comenzó el desalojo de los vecinos, que superan los 1.200. Hasta las nueve de la noche se les dio de plazo para poder sacar parte de sus pertenencias. Como explica Yánes, se habilitaron dos puntos de encuentro, en una gasolinera de La Laguna y el cruce en la costa de Tazacorte, entre La Laguna y la carretera de la costa. Ahí y acompañados por un vehículo de emergencias los vecinos tuvieron solo 15 minutos para recoger aquello que pudieran.
Fuente: EFE / AFP
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