Familiares y amigos de José María Gómez, el joven de Los Álamos de 16 años que murió luego de que su motocicleta chocará contra un patrullero en plena persecución, llevaron su ataúd al Estadio Centenario y dejaron pintadas y algunas ofrendas florarles en pleno partido de reserva entre Quilmes y Unión de Santa Fe. Para sorpresa de todos, el partido estuvo suspendido momentáneamente cuando los deudos llegaron en varios micros e ingresaron por la puerta 4 del estadio. Una vez en el centro de la tribuna, los presentes aplaudieron el féretro del joven y luego se retiraron. En el estadio se pudieron leer inscripciones como "José y Moy presentes", y "Josesito vive". Cabe recordar que el fallecido era hermano de Moysés Fernández, también menor de edad que fue abatido por un efectivo que se encontraba de civil luego de un intento de robo ocurrido en marzo en la localidad de Ezpeleta. Ambos son hijos de un ex referente de la barrabrava de Quilmes.
El hecho
Todo ocurrió en la noche del domingo luego de una denuncia de robo. El joven, que se encontraba circulando en moto con un acompañante, era perseguido por la Policía y luego de acelerar, colisionó contra un patrullero en la intersección de Unamuno y Magallanes en Quilmes Oeste. Por el hecho interviene Gendarmería y la Unidad Funcional de Instrucción Nº 9, a cargo de la doctora Vara.

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