El Dr. José Ignacio Valls, oftalmólogo de Clínica Baviera Murcia, nos explica qué son las miodesopsias o moscas volantes y qué puede significar que aparezcan el campo visual.

¿Por qué a veces vemos pequeñas manchitas que parecen moscas volantes?
Esas pequeñas mosquitas o moscas volantes son consecuencia de opacificaciones que hay dentro de nuestro ojo. Hay que entender que el ojo no está vacío, sino que está relleno de una sustancia, el humor vítreo, que, en ocasiones, tiene algunas opacificaciones o arrugas, que cuando cruzan el eje visual, la luz proyecta una sombra sobre la retina que es lo que nosotros notamos.
¿Son muy habituales? ¿Qué perfil de persona las sufre más?
Las miodesopsias o moscas volantes son bastante habituales a partir de cierta edad debido al envejecimiento y a la deshidratación que se produce en el gel vítreo dentro del ojo. Además, normalmente se adelantan un poquito en las personas miopes.
¿Se pueden prevenir?
No hay nada que podamos hacer para prevenirlas, ya que su aparición está muy ligada al envejecimiento del ojo y a que un ojo sea miope.
¿Cuándo hay que ir al oftalmólogo?
Yo creo que cuando aparece una miodesopsia debemos acudir al oftalmólogo porque, la gran mayoría de las veces, es un síntoma del envejecimiento y no está asociado a ninguna patología ocular. Eso sí, en ocasiones, al producirse el desprendimiento del vítreo se produce una ligera tracción sobre la retina y puede llegar a producirse una rotura en la retina. Esta puede ser la puerta de entrada para la aparición de un desprendimiento de retina.
Hay ciertos signos a los que debemos estar especialmente atentos. Por ejemplo, cuando aparecen muchas mosquitas o cuando estas sombras vienen acompañadas de fogonazos de luz. La retina está diseñada para ver y, cuando hay una tracción sobre ella, lo que vemos son fogonazos de luz que no tienen relación con ningún estímulo lumínico. Por lo tanto, es conveniente consultar al oftalmólogo cuando aparece una miodesopsia o mosca volante.
¿Tienen tratamiento?
Si la miodesopsia no está asociada a una rotura de la retina no tiene tratamiento. Lo conveniente es darle un poquito de tiempo porque, habitualmente, lo que sucede es que, por la gravedad, esa miodesopsia se va depositando en la parte más inferior del ojo, deja de cruzar el eje visual y, por lo tanto, deja de proyectarse sobre la retina y dejamos de verla.

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