¿Cuál es la mejor manera de mantener frescos los cigarros? Una vez que encuentras un cigarro perfecto, debes hacer lo posible para asegurarte de que esté perfecto para fumarlo cuando lo desees. Aquí verás ciertos tips que te ayudarán.
El equilibrio entre humedad y temperatura es la clave : Para un humo perfecto, los cigarros deben mantenerse en un ambiente que se aproxime a sus orígenes tropicales: una temperatura de aproximadamente 21° Celsius (70° F) y un nivel de humedad entre 67-71% es el estándar aceptado.
Humedad : Un cigarro con la humedad adecuada quemará lenta y uniformemente. Si el cigarro está seco, el tabaco se vuelve muy frágil; arderá muy rápido y tendrá un sabor desagradable. Si un cigarro está demasiado húmedo, el tabaco se expande, tapa el cigarro y puede hacer que la envoltura externa se parta.
Temperatura : El calor combinado con el exceso de humedad puede hacer que crezca moho en el cigarro y tiene un impacto directo en la vida de un insecto que crece en el tabaco llamado lacioderma que una vez eclosionado, sube a la superficie, dejando atrás un orificio del tamaño de un agujero de alfiler que arruina el cigarro.
¿Por qué los cigarros deben ser humidificados? El tabaco es una planta tropical. Para mantener las características del cigarro, se debe recrear y mantener el ambiente nativo del tabaco. Por ejemplo, Nueva York no tiene la humedad natural de Rep. Dom., la meca del cigarro actual, por lo que debemos recurrir a medios artificiales para mantener el tabaco húmedo. ¿La solución? Un humidor.
¿Qué es un humidor? Por definición, es cualquier caja o contenedor utilizando un dispositivo que controle los niveles de humedad en su interior. Independientemente de su tamaño, capacidad o precio, los humidores tienen un único propósito: proporcionar un ambiente que mantenga los cigarros frescos y listos para fumar.
¿Cómo puedo saber si mi cigarro está fresco? Use la vista y el tacto. Cuando revise el cigarro, busque evidencia de agrietamiento, verifique si el cigarro está blando o si hay signos de moho, un indicador de demasiada humedad. Un cigarro que se hunde después de apretarse con los dedos es porque está demasiado húmedo; si escuchas un crujido, está demasiado seco.
¿Qué no hacer? Nunca guarde sus cigarros bajo la luz solar directa; la exposición prolongada a la luz solar directa hará que los cigarros se sequen, quiebren y descoloren.
