El Museo del Castillo e Peralada recoge las diferentes colecciones de objetos recopilados a lo largo de años por diferentes generaciones de la familia Martí, propietaria del Castillo. Su biblioteca, de más de 100.000 volúmenes, es una joya para los amantes bibliográficos. Aparte se visita la colección de elementos del vino, del olivo, de la cerámica, del vidrio, de las joyas, de las monedas, o los recuerdos de artistas que han pasado por el Festival Internacional de Perelada, y la visita finaliza en la iglesia. Todo este conjunto formó parte de un monasterio carmelita, fundado en el siglo XIV, que fue abandonado en el siglo XIX, con la desamortización de Mendizabal y volvió a manos de la familia, que lo había cedido a la comunidad religiosa, mientras estuviesen allí.
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