La Senda Del Tiempo es una versión de Celtas Cortos y el quinto adelanto del segundo disco.

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Vuelco al corazón es el título del segundo álbum de Descendientes. Un disco muy fresco, más maduro y lleno de detalles de principio a fin con todo el espíritu del rock. La banda madrileña dibuja un disco muy variado, de gran producción y cuidado en todos los sentidos, mostrando una madurez y crecimiento natural que reconocer. Como quinto single han elegido hacer un cover de Celtas Cortos . Llegó el otoño y con ello la hora de despedirnos de la playa, el buen tiempo y todos los buenos momentos vividos durante el verano. Recordar esos instantes cuando toca sustituir el calor del sol por el flexo de la oficina y la piña-colada por el café de máquina, pondría melancólico a cualquiera… ¿O tal vez no?
Con la guitarra eléctrica sustituyendo a la flauta travesera, Descendientes nos presenta una nueva versión de «La senda del tiempo». La banda madrileña ha querido rendir homenaje a esta conocida canción de Celtas Cortos que tanta huella ha dejado en la historia de cada uno de los integrantes. La calmada intro del principio que nos devuelve a esos instantes de relax que tanto solemos anhelar, es pronto sustituida por un ritmo más energético que anima a subir el volumen y no parar de cantar.


Carlos ''Moly'' Cabezudo Serrano: Voz y guitarra
Andrés Lorenzo Briones: Guitara y coros
Haritz López Núñez: Bajo y coros
Pablo Lorenzo Briones: Batería y coros
Trompeta: Ramiro Huete Martínez
Trombóm: Alonso Pastor Caballero

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Contacto: descendientes.rock@gmail.com

Letra:

A veces llega un momento en que te haces viejo de repente.
Sin arrugas en la frente, pero con ganas de morir.
Paseando por las calles todo tiene igual color.
Siento que algo echo en falta, no sé si será el amor.

Me despierto por las noches entre una gran confusión.
Esta gran melancolía está acabando conmigo.
Siento que me vuelvo loco y me sumerjo en el alcohol.
Las estrellas por la noche han perdido su esplendor.

He buscado en los desiertos de la tierra del dolor
y no he hallado más respuesta que espejismos de ilusión.
He hablado con las montañas de la desesperación
y su respuesta era solo el eco sordo de mi voz.

A veces llega un momento en que te haces viejo de repente.
Sin arrugas en la frente, pero con ganas de morir.
Paseando por las calles todo tiene igual color.
Siento que algo echo en falta, no sé si será el amor.

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