Arrancó el juicio de uno de los casos más resonantes de Córdoba en los últimos años. Brenda Barattini y su amante, de quien no se difundió su nombre para proteger su identidad en calidad de víctima, estuvieron en el banquillo.
La mujer de 27 años está detenida en Bouwer desde 2017 por seccionar el 90 por ciento de los genitales del hombre en un departamento de Nueva Córdoba. Hasta el momento la imputación era por “lesiones gravísimas agravadas por el vínculo y alevosía”, pero la fiscal Laura Batistelli pedirá el cambio de carátula a “intento de homicidio”.
“La intención de una persona no se fija por el resultado, sino por las razones por las cuales actuó de esa manera”, indicó Batistelli. En el primer día del juicio declaró el damnificado y reiteró lo dicho en ocasiones anteriores: “Brenda me quiso matar”.
El hombre tuvo que someterse a una cirugía de reconstrucción de su pene. Durante su declaración hizo hincapié en las secuelas en su función eréctil y a nivel de orina.
“La víctima declaró que Brenda utilizó una tijera. Descartó que haya sido un bisturí”, reveló además Batistelli y mantuvo viva la hipótesis de que la mutilación podría haber estado premeditada.
La abogada de la víctima confirmó además que ambos eran amantes que “tenían cada uno su pareja, pero mantenían encuentros ocasionales”.
Por otra parte, los abogados de Brenda indicaron que ella sólo va a declarar ante los jurados populares porque “revivir todo lo sucedido representa un gran desgaste psicológico”.
Además, los defensores de Barattini explicaron que la joven siempre argumentó que actuó de esa manera porque era víctima de agresiones y se sentía “cosificada”. “Hace casi dos años está alojada en la cárcel de Bouwer y no está en su mejor momento”, agregaron.
Por otro lado, se conocieron algunos dibujos que Barattini realizó en la cárcel, a donde se encarga de la biblioteca. Algunos de los mensajes con los dibujos son replicados en las redes sociales.
