El abuso narcisista, es un trauma relacional de traición, entre un psicópata y su víctima empática.
La diferencia sustancial entre Psicópatas y Empáticos, desde la Psicobiología, se encuentra en sus cerebros, específicamente en la Amígdala Cerebral.
La amígdala es responsable de emociones: como la culpa, la vergüenza y el miedo.
Los psicópatas, tienen la amígdala más pequeña, que el resto de las personas, lo que podría provocar su falta de empatía y su ausencia de miedo.
De este modo, avanza sobre los derechos de sus víctimas, sin culpa ni responsabilidad sobre sus actos.
Por su parte, la amígdala de la víctima de abuso narcisista crece en tamaño y en conexiones neuronales, produciéndose un desajuste que genera ansiedad, depresión y estrés postraumático.
El psicópata, provoca mediante detonantes o triggers, que la amígdala de su víctima, siempre esté "prendida" en alerta permanente, como forma de supervivencia al abuso continuado.
El narcisista obtiene su suministro, a partir de las emociones que genera una amígdala desbordada, y que en su mayor crisis, se convierte en un secuestro emocional, que es cuando la amígdala asume el mando del cerebro.
Por eso, la regulación de la amígdala, permite mantener la ansiedad bajo control y gestionar mejor las emociones.
El cuerpo se equilibra con el Contacto Cero.
Por una sociedad informada en Trauma.
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