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En la imagen se ve el despacho del jefe. Esta sentado frente a su mesa, no se le ve. Ante sí tiene a Torno y a Brusco. En sus manos tiene el jefe un periódico. Mostrarla en primer plano. No tiene texto (o, más bien, se muestra se manera esquemática), pero sí fotos grandes con Víctor, Emi y el rubí junto al museo.
Jefe (con voz ronca): «(leyendo) Víctor y Emi decidieron regalar una antigua piedra preciosa encontrada en una cueva al museo de la ciudad... Ríe (como para sí) ¡Pues muy bien! (dirigiéndose a los ladrones, con voz alta) Y vosotros, ¿habéis entendido?»... (con voz amenazadora) ¡Ya sabéis que es vuestra última oportunidad!»
Brusco y Torno asienten, Brusco dice (con voz temblorosa): «Jefe, ¡todo irá sobre ruedas!»
Es por la tarde. Fachada del museo. Columnas. Iluminación de las farolas desde debajo. Se ven dos figuras: sobre el fondo de las luces del museo parecen muy grandes. Mostrar sus piernas moviéndose silenciosas. Se puede reproducir el sonido del grito de un gato asustado, por ejemplo, porque una de las figuras le haya pisado el rabo.
En off se oye la voz enfadada de Brusco que dice susurrando: ¿¿No puedes ser más silencioso, Torno?? ¡Que no venimos de paseo!
Torno (justificándose, susurrando): Ha sido sin querer... Es el gato el que se ha puesto aquí...
Fachada del museo. Torno y Brusco a la entrada. Abren la puerta de entrada con quien abre una caja fuerte. En primer plano se ven botones y el dedo de Brusco tecleando la combinación de botones adecuada.
Torno (sorprendido): ¿¿Cómo sabes el código??
Brusco (orgulloso): No es momento de charlas. ¡Venga, rápido!
Entran corriendo al museo, siguen hasta la sala de exposiciones. Está lleno de rayos infrarrojos. En medio de la sala está el famoso rubí en un expositor.
Torno (sorprendido): Oye, ¿qué hacemos con todos estos infrarrojos?
Brusco: Hackearemos el sistema de seguridad y los infrarrojos.
Mientras ponen el código, se oye la voz de Brusco: Este dispositivo nos ayudará a hackear el sistema de seguridad del museo: detectará el código del sistema y lo desactivará. (una vez el código está hackeado) ¡Eso es! Unos pocos segundos, ¡y listo!
Brusco (en off): «Pilla la piedra preciosa y vámonos. ¡Vamos, rápido!»
Da algunos pasos hacia el rubí. Pisa en una de las baldosas del suelo cerca del expositor y la baldosa cede por el peso. Se activan las alarmas.
En la imagen vemos a Torno perplejo y dice, con los ojos abiertos: «Brusco, ¿qué pasa?»
Brusco (gritando para que le oiga a pesar de la alarma): ¡Rápido! ¡Nos largamos de aquí! ¡La joya! ¡No olvides la joya!
Fin de la escena.
Se ve en la imagen el coche de Brusco y Torno junto al coche. Ellos están dentro, aceleran y van a toda pastilla por las oscuras calles. Saltan todas las alarmas del museo.
En la escena se ve la comisaría.
Policía (por el megáfono): ¡Atención a los efectivos! Robo en el museo de la ciudad. ¡Se han llevado una antigua piedra preciosa! ¡Hay que capturar rápidamente el furgón naranja!
En la imagen se ve la persecución del furgón. Va a toda pastilla, de las ruedas salen chispas. El furgón entra en un túnel. En off se oyen las voces de Brusco y Torno:
Brusco: «¡Rápido, rápido! ¡Los tenemos encima! ¡Vamos!»
Torno: «¡Esta antigualla va a toda mecha!»
Policía (por el megáfono): ¡Os ordeno que os detengáis! ¡Entregaos!
Brusco, en off: «¡No le escuches! ¡Dale! ¡Aquí nadie se entrega!»
En la imagen se ve el túnel desde el otro lado. Llegan dos coches patrulla, que se detienen a la salida del túnel.
Por la radio, un policía dice a otro: «¡Estamos listos! ¡Ya salen del túnel!»
El furgón sale volando del túnel, embiste el bloqueo de los coches patrulla y sigue adelante a toda velocidad. En ese momento...
Torno: «¡Para! ¡ААААААH!»
Gritos de los policías: «¡Huyen! ¡Han roto el bloqueo!»
Brusco (grita): «¡Coge el volante! ¡Torno! ¡Escúchame!»
El coche de los delincuentes se estampa contra un poste.
Brusco y Torno gritan: «¡¡¡АААААААH!!! ¡¡Nooooo!!»
Fin de escena.
En la imagen se ve el furgón, del que sale humo, y a su lado están dos policías (o tres coches), sirenas puestas. Brusco y Torno esposados, llenos de polvo y arañazos. Junto a ellos se encuentra un agente y Víctor.
Víctor (con voz victoriosa): ¡Ahora sí que se acabó! ¡Ya se arreglará la policía con vosotros! ¡Asunto terminado!
Brusco: «Síííí, Torno... Hoy hemos caído... El jefe nos va a dar pero bien.»
Brusco y Torno suspiran pesadamente a la vez.
