Muchas de las sanciones económicas que pesan sobre la gestión de Nicolás Maduro son cosa del pasado, en lo que el mandatario venezolano describe como una "nueva era" en las relaciones con Washington. Las concesiones del Gobierno de Joe Biden responden al compromiso de Maduro de trabajar con la oposición para sacar adelante elecciones presidenciales justas y libres en 2024.
