La trama del juego "The Last of Us" no es completamente ficticia; es un hongo real llamado Cordyceps que infecta insectos en la realidad. Pero, ¿puede infectar a los humanos? Todo comienza con una espora microscópica que flota en el aire y, al entrar en un insecto, comienza a desarrollarse. La conciencia primitiva del insecto queda intacta; simplemente, el hongo estimula la liberación de dopamina y recompensa al huésped si hace lo que se necesita. Por ejemplo, una hormiga infectada escala una brizna de hierba y se aferra con todas sus fuerzas, fijando su cuerpo para que el hongo pueda crecer. Directamente desde la cabeza, se forma una estructura con esporas. El Cordyceps logra su objetivo y puede destruir toda una colonia de hormigas, por lo que las hormigas infectadas son llevadas lejos por otras hormigas. Aquellos que no se deshacen de los infectados tampoco regresan nunca más al hormiguero. Curiosamente, algunas personas consumen Cordyceps con fines medicinales, pero para nuestro organismo, es demasiado complejo de conquistar. Al menos, por ahora.

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