Tensa la entrevista entre Daniel Esteve, fundador y líder de DESOKUPA, y la siempre dicharachera María Gómez, periodista televisiva.
“Te has sentado muy cerca de la cárcel, no sé si tienes miedo de que alguna vez puedas entrar en ella”, comenzó María Gómez.
“¿Qué pasa, que eres juez?”, replicó serio Esteve.
A partir de ahí, todo fueron palos.
Esteve quiso dejar claro en todo momento que las técnicas de su empresa no son violentas y que si es necesario pagar a algunos de los okupas para que dejen las casas, se hace.
“Me cuesta entender que tus compañeros tengan esa fuerza física si vuestro principal poder es la educación y la negociación”, insistió ella.
El jefe de DESOKUPA se limita a replicar que la presencia física imponente es importante “porque muchas veces te encuentras gente muy mala”.
“Yo tengo chicas desokupadoras pero, cuando voy a un narcopiso, no voy con la chica, por mi propia seguridad. ¿Lo entiendes? Si tengo que ir a un narcopiso, que sé que va a haber armas, conmigo va a venir gente que ha hecho cursos de lucha contra arma blanca. Me imagino que es fácil de entender esto”.
“Sí, hombre. No me vaciles porque lo entiendo perfectamente”, alegó la televisiva, añadiendo que los miembros de Desokupa “dan miedo”.
La respuesta de Esteve es letal:
“A mí eso me da igual. Yo no cometo ningún delito, y el okupante sí”.
