Nuestros restaurantes favoritos están desapareciendo de la vista a medida que el empeoramiento de la situación económica sigue asfixiando a las empresas estadounidenses. Los consumidores comen menos fuera de casa y ajustan sus presupuestos, por lo que incluso los grandes nombres del sector están viendo cómo sus negocios se pudren desde dentro. En los últimos tres años, más de 160.000 restaurantes han cerrado definitivamente en todo el país y, por desgracia, esa tendencia sigue cobrando fuerza en 2023.

Es difícil de creer, pero ni siquiera las cadenas de comida rápida más grandes y exitosas del mundo son inmunes a las quiebras entre franquiciados. Hace apenas un par de meses, Rice Enterprices LLC se declaró en quiebra y cerró todos los restaurantes McDonald's que explotaba. Graves problemas laborales con menores llevaron al franquiciado a enfrentarse a una demanda millonaria que afectó a toda la marca. El mes pasado, la empresa anunció el cierre de cientos de establecimientos, no sólo en Estados Unidos, sino en todo el mundo. Algunos de sus formatos se han quedado anticuados, dicen los ejecutivos.

La decisión se tomó después de que un equipo de miembros del consejo de administración analizara el potencial de crecimiento de algunos locales y decidiera centrarse en los que ofrecían mayor rentabilidad financiera, excluyendo de su cartera los establecimientos en dificultades.
Propiedad de la misma empresa matriz que Burger King, la popular cadena de pollo Popeyes también se enfrentó este año a la quiebra de uno de sus mayores franquiciados.

Premier Cajun Kings fue fundada por Manraj "Patrick" Sidhu en 2018, y al año siguiente, había triplicado el número de tiendas que operaba, y generaban más de 30 millones de dólares en ventas anuales. Trágicamente, el Sr. Sidhu falleció en mayo de 2022, y su negocio nunca pudo recuperarse por completo de la pérdida de su único gerente. El descenso de las ventas, el aumento de los costes y las pérdidas operativas obligaron al franquiciado a cerrar un gran número de restaurantes en Alabama y Tennessee.

Algunos locales fueron desalojados por el propietario, lo que dejó a la empresa con sólo la mitad de sus locales. En marzo de 2023, PCK se declaró finalmente en quiebra. "Esta trágica pérdida, unida a diversos factores macroeconómicos, ha causado una tremenda incertidumbre y trastornos en el negocio", rezan los documentos judiciales de la declaración de quiebra.

Del mismo modo, Chuck E. Cheese ha marcado generaciones y ganado una enorme popularidad a lo largo de las décadas. Fundada en San José (California), la cadena de pizzerías es un éxito entre los niños, pero eso no significa que las cosas hayan sido siempre fáciles para la empresa. La cadena no es nueva en los tribunales de quiebras, ya que su primera declaración se registró en 1984, cuando arrastraba una deuda de 50 millones de dólares en bonos impagados.

Su empresa matriz, Pizza Time Theater, decidió solicitar protección judicial para evitar la indigencia corporativa. Aunque eso ayudó a la cadena a mantenerse en el negocio, no aseguró su supervivencia a largo plazo, especialmente en medio de una pandemia mundial única en la vida. Sólo que esta vez, la empresa tenía una deuda de 705 millones de dólares. A día de hoy, el futuro de Chuck E. Cheese sigue siendo incierto. Pero dada la magnitud de su deuda, sólo un milagro puede salvar a la cadena.

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