En este video, Jeannine Palacios González, establece la diferencia entre un Jefe, Supervisor, Gerente, es decir, entre un jefe tradicional y entre un líder. En vista que, no todo jefe o gerente o supervisor es a la vez un líder del grupo que dirige. Lamentablemente muchos jefes tienen el título a nivel formal, en una organización o Empresa, pero no cuentan con los valores, las actitudes, habilidades y competencias laborales, en particular, hablando sobre este tema, no cuentan con las competencias genéricas o competencias de personalidad para ser un verdadero líder, que compromete y motive a su grupo o equipo de trabajo para estar y mantenerse motivado en el alcance de las metas organizacionales, en el alcance de las metas de un área o un departamento de trabajo.
Un verdadero líder es aquel que convierte a su grupo de trabajo en un verdadero equipo de trabajo, en donde los miembros tienen un sentido de pertenencia a la Empresa para la cual trabajan, comparten los mismos objetivos, existe motivación, colaboración, ayuda mutua, cooperación, compromiso, respeto entre los compañeros de trabajo. El líder no se siente el jefe, el manda más, sino que se siente un miembro más del grupo, quien trabaja arduamente al lado de su equipo de trabajo, dando el ejemplo, manteniendo enfocado a su equipo de trabajo en un plan de acción para alcanzar los objetivos estratégicos de la organización para la cual trabajan.
Lo ideal es cuando un jefe tradicional o un jefe es a la vez un líder.
Cuando hablamos de un liderazgo centrado en valores es cuando el jefe es líder a la vez, cuando ama su trabajo, le apasiona lo que hace, le apasiona su trabajo y le apasiona trabajar en equipo. El líder centro en valores, es una persona con valores bien puestos, bien arraigados, que no se jacta por ser jefe, sino más bien es una persona humilde, trabajadora, luchadora, que pregona con el ejemplo con un desempeño laboral exitoso. Este líder centrado en valores trabaja mano a mano con su equipo de trabajo. Existe una auto-motivación interna entre todos los miembros del grupo, pero también existe una motivación laboral externa. Todo el equipo de trabajo disfruta el trabajo que realiza y se apoyan mutuamente. El líder centrado en valores utiliza una comunicación asertiva con la cual motiva a su equipo de trabajo a que se logre un consenso en la definición de los objetivos laborales. Claro que hay objetivos organizacionales que no son negociables, pero cuando se toma en cuenta el punto de vista de los colaboradores, la Empresa, la Organización, puede llegar a implementar ideas innovadoras y puede llegar a alcanzar una mayor productividad y presencia en el mercado laboral. El líder alinea a sus trabajadores a los objetivos organizacionales cuando todos disfrutan el trabajo que hacen, manteniéndose enfocados en los objetivos, manteniéndose comunicados y motivados.

Jeannine Palacios González
“No sueñes tu vida, vive y disfruta tus sueños”
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