La presbicia o vista cansada es una alteración visual que se produce cuando el cristalino pierde elasticidad y disminuye su capacidad de acomodación. Suele aparecer alrededor de los 40 ó 45 años y se va agravando con el paso del tiempo. Los principales síntomas que suele presentar el paciente con presbicia son: ver borrosos los objetos cercanos, (la pantalla del móvil, el periódico, los libros, el menú del restaurante...), comenzar a alejar los objetos para poder verlos, necesitar más iluminación para leer, coser o conducir y comenzar a necesitar gafas de cerca para realizar ciertas actividades.
El paciente con presbicia suele comenzar a notar dificultades para ver con nitidez objetos cercanos y necesita más luz para realizar tareas como leer, coser o ver la pantalla del móvil. En la actualidad, y debido a los importantes avances científicos que se han producido, existen dos tratamientos quirúrgicos para corregir la presbicia: la remodelación de la córnea con cirugía refractiva láser y la colocación de una lente intraocular multifocal.
Con esta última intervención, además de corregir la presbicia, se pueden corregir otros defectos refractivos, como la miopía, la hipermetropía y/o el astigmatismo. Además, la implantación de la lente intraocular multifocal permite evitar la futura aparición de cataratas.
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