El pasado 18 de febrero, La Corte Constitucional determinó por medio de una sentencia, que las parejas homosexuales, sólo podrán adoptar niños, siempre y cuando sean hijos biológicos de uno de los dos.
Esta decisión de la Corte, cerró las posibilidades a que las uniones entre personas del mismo sexo adopten menores de padres distintos, algo que agitó nuevamente el debate sobre el derecho a la igualdad en el país y la lucha contra la discriminación. Todo se da tras varios meses de intenso debate, que inició con la tutela interpuesta por Ana Leiderman, una lesbiana que solicitó que Verónica, su compañera sentimental, adoptara a una de sus hijas.
La decisión de la Corte, desató reacciones contrarias entre Organizaciones LGTBI y movimientos que se oponen a este tipo de adopciones.
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