El flamenco (Phoenicopterus) es un ave y tiene patas y cuellos largos.
El orden Ciconiiformes también incluye cigüeñas, garzas e ibis, aunque la clasificación de los flamencos ha desconcertado a los taxónomos durante años.
La estructura esquelética, las proteínas de la clara de huevo y los patrones de comportamiento hacen que los científicos vinculen a los flamencos con varios grupos.
La pelvis y las costillas de un flamenco son similares a las de las cigüeñas. La composición de las proteínas de la clara de huevo de los flamencos es similar a la de las garzas.
Los patrones de comportamiento, especialmente los de los pollos (Las crías), los vinculan estrechamente con los gansos (Orden Anseriformes).
Los flamencos también tienen patas palmeadas y plumaje impermeable como los gansos.
Características de los flamencos.
Las patas de los adultos son más largas que el cuerpo del flamenco en sí, midiendo entre 80 y 125 cm, dependiendo de la especie.
El cuello es largo y sinuoso. Un flamenco tiene 19 vértebras cervicales (cuello) alargadas que permiten el máximo movimiento y torsión.
La envergadura de las alas de esta ave varía de 95 a 100 cm.
Hay 12 plumas de vuelo principales en cada ala.
Estas plumas negras son visibles cuando las alas están extendidas.
Tamaño de los flamencos.
El flamenco común (Phoenicopterus roseus) es el más alto, mide de 120 a 150 cm y pesa hasta 3,5 kg.
Mientras que el flamenco enano (Phoeniconaias minor) es el más pequeño, mide 80 cm y pesa sólo 2,5 kg.
Los machos alcanzan su tamaño máximo entre un año y medio y dos años.
Los machos son ligeramente más grandes que las hembras, pesan más y tienen alas más largas; sin embargo, la determinación visual del sexo de los flamencos no es confiable.
La envergadura de las alas de los flamencos varía de 95 a 100 cm para el enano a 140 a 165 cm para el común.
Coloración de los flamencos.
El color de las plumas varía según la especie, desde el rosa pálido hasta el carmesí o el bermellón.
La coloración de las plumas se deriva de los pigmentos carotenoides que se encuentran en los alimentos de los flamencos.
La coloración de los flamencos macho y hembra es la misma.
Los pollos recién nacidos son grisáceos, tardando aproximadamente de uno a dos años en obtener una coloración adulta completa.
Los padres pueden perder parte de su coloración rosada mientras crían a sus hijos.
La coloración de las patas y patas de un flamenco varía según la especie, de amarillo a naranja o rojo rosado.
El flamenco andino es la única especie que tiene patas y pies amarillos.
Cabeza de los flamencos.
Los ojos están ubicados a ambos lados de la cabeza, los polluelos del flamenco tienen ojos grises durante aproximadamente el primer año de vida, los adultos, sin embargo, tienen los ojos amarillos.
El pico de un flamenco adulto es negro, rosado o de color crema. La coloración varía según la especie.
El pico superior e inferior, o mandíbula, está angulado hacia abajo justo debajo de la fosa nasal.
La mandíbula superior es delgada y plana, y funciona como un párpado en la mandíbula inferior.
La mandíbula inferior es grande y en forma de canal o quilla.
Las crestas en forma de dientes en la parte exterior del pico de un flamenco ayudan a filtrar la comida del agua, tanto la mandíbula superior como la inferior contienen dos filas de una estructura en forma de peine o de pelo llamada laminillas.
Cuando las mandíbulas se juntan, las láminas de las mandíbulas superior e inferior encajan.
La lengua grande y carnosa de un flamenco está cubierta con proyecciones en forma de cerdas que ayudan a filtrar el agua y las partículas de comida a través de las láminas.
Plumas de los flamencos.
Las plumas de los adultos tienen un pequeño y delicado accesorio que surge de la pluma principal en el punto donde la pluma se fusiona con el eje de la pluma, esto se llama un eje posterior.
Hay 12 plumas de vuelo principales en cada ala. Estas plumas negras son visibles cuando las alas están extendidas.
El flamenco tiene de 12 a 16 plumas en la cola.
Las plumas del contorno cubren todo el cuerpo excepto el pico y las partes escamosas de las piernas y los pies, protegen la piel del daño y ayudan a agilizar el vuelo del flamenco.
Los flamencos mudan y reemplazan las plumas de sus alas y de su cuerpo a intervalos irregulares que van desde dos veces al año hasta una vez cada dos años.
La muda está relacionada con el ciclo reproductivo y las plumas mudadas pierden su color.
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