LAS CARICIAS QUE TE DEVUELVEN A LA VIDA
"Ella había ido a consulta médica por un dolor fuerte en el estómago.
El doctor le había hecho la clásica exploración en el abdomen, presionando puntos claves del aparato digestivo.
Ella aún estaba en la camilla, ya estaba sentada, acomodándose la ropa, y prestando atención a lo que el médico le explicaba.
El le estaba desarrollando con mucha paciencia el real problema que tenía en uno de sus órganos, algo que quizás necesitaría una pronta cirugía.
Ella hizo un gesto de miedo y preocupación en su rostro... y él intentando calmarla le presionó la mano con calidez, animándola: "¡No temas!... irá todo bien, no es una cirugía severa, o de riesgo importante... tranquila... "
Y en ese momento ella miró la mano del doctor sobre la suya y comenzó a llorar.
El tomó la mano de ella entre las de él y le siguió hablando con cariño y paciencia: "Créeme, no será una cirugía de alto riesgo, saldrá todo bien, te sentirás mucho mejor luego de esa intervención, el dolor desaparecerá..."
Pero ella no podía ocultar sus lágrimas... que cuanto más le hablaba con calidez el doctor más abundantes corrían por su rostro.
El doctor le preguntó porqué se había puesto así. No entendía por qué tanta angustia.
Y ella confesó: "No... no estoy asustada doctor... es que acabo de pasar por un largo período en el que nadie me tocó, hacía años que nadie me presionaba la mano con cariño, ni yo misma me había dado cuenta lo necesitada que estaba de una simple caricia... "
Y luego le explicó mejor:
Ella había sido por años una víctima de malos tratos.
Hacía ya unos pocos años que había logrado apartarse del maltratador... pero se había cobijado en una soledad llena de miedos y desconfianzas , donde no admitía ningún tipo de roce o acercamiento físico con nadie, ni siquiera con sus hijos.
Daba abrazos rápidos a sus seres más queridos, un saludo apurado, miradas esquivas, un leve y breve apretón de manos... pero jamás se había permitido que alguien con un sincero afecto se acercara a su cuerpo.
Lo que para el doctor fue un roce casual y normal, apara animarla ante el pronóstico de la próxima cirugía... para ella fue un volver a sentirse: ¡acariciada sin miedo! respetada... ¡y de nuevo viva!. "
Ps Patricia Cabrera Sena
Terapia Psicológica on line
Sesiones privadas
Contactar:
WhatsApp: +34 640 38 4667
Redes sociales: [ Ссылка ]

свернуть