A la inmensa mayoría de personas nos cuesta muchísimo trabajo ahorrar de modo consiente nuestro dinero, no se preocupen, no es nuestra culpa.


Los seres humanos estamos programados para pensar en el corto plazo, ya que en nuestro pasado evolutivo no teníamos el concepto del ahorro implantado en nuestros cerebros como sí lo tienen otras especies. La comida era lo que quizá podríamos ahorrar y se echaba a perder de inmediato, por eso o te la comías toda, o la tenías que abandonar para evitar que depredadores te persiguieran.


Nuestro pasado evolutivo se hace presente cuando de dinero se trata, como nuestros antepasados no estaban seguros de poder comer al día siguiente, tenían que aprovechar. Hoy en día la gente muere de sobrepeso y eso se traduce a su vez en los gastos cotidianos que hacemos. Sentimos que tenemos que gastar todo nuestro dinero, porque no sabemos si mañana estaremos vivos.



Por lo que tenemos que encontrar formas de engañar a nuestro cerebro para motivarlo a ahorrar. En el siguiente video presentamos métodos prácticos de ahorro que nos han funcionado para engañar a nuestro cerebro.

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