El Dr. Armando Alducin habla en este video acerca de aquellas señales que sentimos en el espíritu de rumores de guerra, los cascos del apocalipsis así como las señales del final de los tiempos que nos pone a pensar si es este el final de la humanidad. El pastor Armando Alducin explica algunos de los eventos políticos mundiales en la actualidad a la luz de varias profecías bíblicas que hacen indicar que estamos en lo que la Biblia describe como dolores de parto. También el pastor Alducin responde a diversas preguntas de la audiencia en donde aclara temas sobre el anticristo, la nación de Israel como el enfoque de los tiempos del fin y otras inquietudes cristianas acerca de la profecía bíblica.

En este video el pastor Armando Alducin hace referencia a la autodestrucción humana que se viene gestando desde la primera y segunda guerra mundial y cómo todo esto se va orquestando para un inminente final de la humanidad.

En esta exposición el pastor Armando Alducin comenta que para cumplir las profecías finales se tenía que cumplir….
• El debilitamiento político democrático y moral de los Estados Unidos. (no aparecen en las profecías finales).
• El despertar de Rusia desde el año 2001 en que Putin tomó el mando. Rusia ha comenzado su proyecto de reunificar a la antigua Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas que fue divida en 15 repúblicas para jugar el papel del protagonista final de las profecías bíblicas (Ez.38-39).
• La unión de Rusia-Irán-Siria-Turquía para esta invasión final. Actualmente ya están unidas estas naciones y ¡en la frontera con Israel!
• Surgimiento del Islam invadiendo Europa con millones de refugiados. Si el Anticristo
surge del islam, es lógico tendrán que aceptarlo de sus filas (Is.10:12).
• Amenaza nuclear de Irán y Corea del Norte (Ap.6:8; 9:13-15).
• EL SURGIMIENTO DE CHINA (Ap.16).
• La re-definición del matrimonio (Is.24:3-6). ¡Esta es la señal más grande de
descomposición social del mundo! (Mal.2:13-14).
Así, es, tornados, huracanes, terremotos, incendios, inundaciones, granizadas, t-sunamis,
etc., son la señal que las fuerzas de la naturaleza se han vuelto en contra de nosotros por el pecado humano.

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