Aníbal Pachano protagonizó unos cuadros del musical Smile, secundado por su hija Sofía Pachano y con más de veinte artistas en escena. El jurado de Bailando bailó, cantó y se lució en el marco de una superproducción de música, luces y vestuario.
El musical desplegó su glamour y mostró la categoría del espectáculo que triunfa en la calle Corrientes. Pachano cerró el cuadro junto a su hija y el resto del elenco, luciendo un impecable frac dorado, con una infaltable y sofisticada galera al tono.

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