Hoy vamos a hacer este estupendo pan de espelta casero. En esta receta vamos a usar harina blanca de espeLta, pero también sirve para harina integral o mezclada.

► INGREDIENTES:

- 170 g de agua.
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra.
- 15 g levadura fresca Levital
- 310 g harina de espelta
- 1 pellizco de sal

► ACCESORIOS ÚTILES:

- Recipiente de cristal con tapa especial para horno

► PREPARACIÓN:

Para hornear este pan vamos a necesitar un recipiente de cristal con tapa especial para horno.

Untamos la base y los laterales del recipiente de cristal con un poco de aceite de oliva para que la masa no se pegue.
Calentamos el agua durante 10 segundos en el microondas para que esté tibia.
En un bol vertemos el agua, la cucharada de aceite y la levadura.
Removemos hasta que la levadura se deshaga completamente.
Este es un buen momento para poner el pellizco de sal a la harina y removerla, aunque yo no hago. Yo prefiero hacer el pan sin sal y ponerle un poco de aceite de oliva virgen cuando me lo voy a comer. Además, al no poner sal vamos a favorecer la fermentación de la levadura.

Vamos removiendo y añadiendo la harina hasta conseguir una masa que no esté pegajosa. En ocasiones tendremos que añadir unos pellizcos extra de harina para esto no ocurra.

Nota: Si en lugar de la levadura refrigerada Levital queréis usar la Bio Levadura panificable Biográ, es importante que la mezcléis directamente con la harina (nunca con el agua), ya que de lo contrario la masa no nos crecerá.

Una vez tenemos la masa hecha la ponemos en el recipiente de cristal, la tapamos y la dejamos fermentar sobre la encimera.
Precalentamos el horno a 210ºC

Con la masa que se nos ha quedado en las manos y en el recipiente hacemos una bolita y la ponemos en un vaso con agua. Ahora sólo tenemos que esperar hasta que la bolita que está en remojo, flote. Este proceso puede tardar de 10 a 20 minutos.

Cuando la bola flota significa que ha llegado el momento de meter la masa en el horno. Ahora, antes de meterla en el horno, podemos aprovechar para adornarla con unos cortes superficiales y/o espolvoreando un poco de harina por encima.
Metemos la masa en el horno con la tapa puesta y subimos la temperatura hasta 230ºC.

Pasados 40 minutos sacamos el recipiente del horno, le quitamos la tapa, lo ponemos boca abajo sobre una reja y lo dejamos enfriar. De este modo la fuerza de la gravedad hace que el pan no se deshinche mientras que la reja permite que el pan respire por abajo y se vaya enfriando.

Si tenemos prisa podemos sacar el pan con una espátula, pero para que no se estropee, suelo dejarlo hasta que el pan se cae sólo.

Una vez el pan se ha caído conviene retirar el recipiente ya que de lo contrario la condensación que se forma lo podría mojar.

Bueno, ya sabéis como hago el pan de espelta casero. Si tenéis cualquier pregunta o consulta no dudéis en dejarla en los comentarios.
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¡Nos vemos en el próximo vídeo de #destmenorca !!!

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