Danza de la gitana (1927), de Ernesto Halffter Escriche (1905-1989) (score). Alicia de Larrocha, piano.
De talento muy precoz, Ernesto Halffter compuso a los 15 años su primera obra de consideración, tres obras líricas para piano tituladas conjuntamente como Crepúsculos. Esta obra se estrenaría en 1922. Para su Marche joyeuse consiguió que Salvador Dalí dibujara su autorretrato.
El año 1923 es muy importante en el desarrollo posterior de la carrera de este eminente músico, puesto que conoce a Manuel de Falla, ya entonces totalmente consagrado, y le enseña su música. Gratamente impresionado por Halffter, Falla lo acepta como discípulo. La relación entre maestro y discípulo fue muy intensa, hasta el punto de que en 1924, cuando Halffter contaba sólo con 19 años, Falla le confió la dirección de la Orquesta Bética de Cámara de Sevilla, de la que será director hasta que se disuelva.
En 1925 su obra Sinfonietta para orquesta le hace ganar el Premio Nacional de Música de España, galardón que volvería a obtener en 1984. Halffter viajará a París en donde continuará mejorando gracias a la influencia de Maurice Ravel.
Aunque normalmente este grupo suele circunscribirse a la Literatura es posible incluir a Ernesto Halffter dentro de la Generación del 27, de alguna de cuyas actividades participó. También se han utilizado en ocasiones las denominaciones de Grupo de los Ocho (que integraría, además de a Ernesto, a su hermano Rodolfo, Juan José Mantecón, Julián Bautista, Fernando Remacha, Rosa García Ascot, Salvador Bacarisse y Gustavo Pittaluga) o Generación de la República.
Es autor de numerosas obras para orquesta, así como para instrumentos solistas. Casado con la pianista portuguesa Alice Câmara Santos, mantuvo una especial curiosidad por la música popular de Portugal, donde residió por largos períodos (a lo que su sobrino Cristóbal, también compositor, se referiría como medio exilio. La más señera prueba de su lusofilia musical es su Rapsodia portuguesa para piano y orquesta, de 1938. Se le llegó a apelar Halffter el portugués en contraste con su hermano Rodolfo Halffter el mexicano. Compuso, además, ballets y numerosas bandas sonoras de películas, así como la llamada "Melodía Iberoamericana", utilizada por el Festival Internacional de la OTI como sintonía oficial.
No meDanza de la pastora (1927), de Ernesto Halffter Escriche (1905-1989) (score). Alicia de Larrocha, piano.
De talento muy precoz, Ernesto Halffter compuso a los 15 años su primera obra de consideración, tres obras líricas para piano tituladas conjuntamente como Crepúsculos. Esta obra se estrenaría en 1922. Para su Marche joyeuse consiguió que Salvador Dalí dibujara su autorretrato.
El año 1923 es muy importante en el desarrollo posterior de la carrera de este eminente músico, puesto que conoce a Manuel de Falla, ya entonces totalmente consagrado, y le enseña su música. Gratamente impresionado por Halffter, Falla lo acepta como discípulo. La relación entre maestro y discípulo fue muy intensa, hasta el punto de que en 1924, cuando Halffter contaba sólo con 19 años, Falla le confió la dirección de la Orquesta Bética de Cámara de Sevilla, de la que será director hasta que se disuelva.
En 1925 su obra Sinfonietta para orquesta le hace ganar el Premio Nacional de Música de España, galardón que volvería a obtener en 1984. Halffter viajará a París en donde continuará mejorando gracias a la influencia de Maurice Ravel.
Aunque normalmente este grupo suele circunscribirse a la Literatura es posible incluir a Ernesto Halffter dentro de la Generación del 27, de alguna de cuyas actividades participó. También se han utilizado en ocasiones las denominaciones de Grupo de los Ocho (que integraría, además de a Ernesto, a su hermano Rodolfo, Juan José Mantecón, Julián Bautista, Fernando Remacha, Rosa García Ascot, Salvador Bacarisse y Gustavo Pittaluga) o Generación de la República.
Es autor de numerosas obras para orquesta, así como para instrumentos solistas. Casado con la pianista portuguesa Alice Câmara Santos, mantuvo una especial curiosidad por la música popular de Portugal, donde residió por largos períodos (a lo que su sobrino Cristóbal, también compositor, se referiría como medio exilio. La más señera prueba de su lusofilia musical es su Rapsodia portuguesa para piano y orquesta, de 1938. Se le llegó a apelar Halffter el portugués en contraste con su hermano Rodolfo Halffter el mexicano. Compuso, además, ballets y numerosas bandas sonoras de películas, así como la llamada "Melodía Iberoamericana", utilizada por el Festival Internacional de la OTI como sintonía oficial.
No me pertenecen ni el audio ni las partituras mostradas en el vídeo.
audio: [ Ссылка ]
partitura: ScorSer
![](https://i.ytimg.com/vi/hDMmronHxBQ/maxresdefault.jpg)