Desde hace mucho tiempo que se sabe que dentro y sobre el cuerpo humano habitan una gran cantidad de microorganismos, antes se pensaba que únicamente era una relación en la que nosotros les dábamos un lugar para hospedarse y ellos nos ayudaban a no tener otro tipo de microorganismos, pero en los últimos años los estudios en relación a estos microorganismos han avanzado de forma importante y actualmente se sabe que su función en nuestra vida es mucho más importante.
Estos microorganismos se encuentran en diferentes partes de nuestro organismo entre los que están los pulmones, la piel, la vagina y el tracto digestivo; se calcula que en el organismo humano hay más de 10 veces más microorganismos en nuestro cuerpo que células humanas, lo que es más de varias decenas de billones, así que como podemos imaginarnos su existencia, el tipo, cantidad y calidad de estos microorganismos puede afectar de forma positiva o negativa en diversas reacciones de nuestro cuerpo.
Y aunque todos son muy importantes, el día de hoy quiero enfocarme a los microorganismos que habitan en el intestino, que años atrás se conocía como “flora intestinal” el nombre actualizado de estos microorganismos es Microbiota intestinal.
