Hermosos, pero llenos de misterio y magia a la vez, los cenotes son las joyas más bellas de la Península de Yucatán. Resguardados por la selva, nadar en un cenote es una aventura que no puedes perderte durante tus vacaciones en Cancún, la Riviera Maya o Tulum.

1. Fácil de llegar
Una de las mayores ventajas del Cenote Azul es su accesibilidad desde los mejores lugares de la Riviera Maya donde se alojan la mayoría de los turistas.


EL CENOTE AZUL . Está situado justo al lado de la carretera principal, lo que significa que es posible visitarlo durante unas horas de camino a su hotel o a otro destino en Yucatán.

Si te alojas en Tulum, este Cenote está a sólo 30 minutos al norte. Es un viaje corto y fácil por la carretera 307 hasta llegar a Puerto Aventuras. El Cenote Azul estará a tu izquierda una vez que llegues.

Desde Playa del Carmen, el Cenote Azul está a sólo 25 minutos en coche por la 307, por lo que es uno de los cenotes más cercanos a Playa del Carmen

2. Cenote Abierto
Otra razón para visitar este cenote completamente abierto. A diferencia de otros cenotes, que están metidos dentro de cuevas oscuras y misteriosas, Azul se encuentra es un gran sumidero abierto.
3. Numerosas actividades al aire libre
Los aficionados al aire libre tendrán numerosas actividades en las que participar durante tu visita. Los diferentes niveles de agua de las piscinas hacen que el Cenote Azul sea un lugar popular para practicar el esnórquel, el buceo o simplemente pasar el rato.

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