Santiago Abascal va duro y a la cabeza.
Visiblemente afectado, pero sin descomponer el gesto ni crispar el tono, el lñider de VOX ha vuelvo a reiterar su tesis de a los violentos narcotraficantes hay que responderles con dureza y máxime tras el 'asesinato' de dos guardias civiles en Barbate (Cádiz).
El crimen tuvo lugar este 9 de febrero de 2024, al ser embestida la pequeña patrullera de los agentes por una narcolancha en el puerto de esa localidad.
"Lo dijimos y lo diremos: Al narco plomo, o plomo... si queremos evitar que dominen el país como ocurre con las narcodictaduras de Iberoamérica".
Abascal ha enviado su "abrazo y reconocimiento a la Guardia Civil" y su pésame a las familias de los dos agentes fallecidos.
El líder de VOX ha denunciado tajante el "abandono" en el que el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, tiene al instituto armado.
"Abandonados por Marlaska, que solo se preocupa de reprimir las protestas contra el Gobierno. Asesinados por narcos que se aprovechan de la debilidad de un gobierno que se dedica a amnistiar a criminales. Honrados por todos los españoles de bien, que prometemos no dejar de exigir los medios que necesitan nuestros guardias para defenderse y defender nuestras fronteras".
Abascal no llegó a decirlo con palabras, pero por las redes sociales, a propósito del despropósito e irresponsabilidad que supone despachar literalmente inermes a seis agentes en una barca neumática de cinco metros, a enfrentarse con seis gigantescas narcolanchas de 14 metros cada una, corre el malvado rumor de que el crimen le pillo a Marlaska 'acicalándose para los Premios Goya:'.
La realidad es que, junto a Sánchez y Yolanda Díaz estaba previsto que asistieran a la ceremonia, repleta de artistas sánchistas y suvencionados y protegida por 500 antidisturbios, el ministro del Interior, el de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, y la ministra de Igualdad, Ana Redondo.
El doble homicidio sucedió cuando los agentes, junto a otros cuatro compañeros, se dirigían a identificar a los ocupantes de varias narcolanchas que se habían refugiado del temporal en el puerto de Barbate. Mientras varios vecinos que estaban en el muelle les jaleaban, una de las narcolanchas pasó por encima de la embarcación de los agentes, mucho más pequeña; dos de ellos, de 39 y 43 años, fallecieron, y otros dos resultaron heridos, uno de gravedad
