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Madrid sigue siendo una ciudad sorprendente y cargada de ofertas que saben aún mejor cuando no afectan a nuestro bolsillo. Las posibilidades de disfrutar de nuestra ciudad con planes gratis son infinitas y nuestra reportera Cristina Pascual ha salido a la calle para descubrir y saborear Madrid "por la cara".
Visitamos el parque del Retiro, donde cada día se reúnen cientos de personas para cuidar su cuerpo sin soltar ni un euro. Son las clases de gimnasia del programa Enforma de la Comunidad de Madrid y su éxito es tal que cada semana acuden a su llamada más de 2.000 seguidores.
Para recuperar fuerzas tras el deporte, podemos coger sitio en el restaurante Malacatín, que desde hace más de un siglo ofrece gratis su cocido, eso sí, siempre que el comensal sea capaz de terminarlo. Un reto tentador pero imposible, pues a día de hoy, ninguno de sus más de 100 clientes diarios ha logrado superarlo.
Otra opción son los huertos comunitarios, como el de Villaverde Alto, que dentro de la Red de Huertos de Madrid reparte productos ecológicos gratis gracias al trabajo y cuidado de los vecinos del barrio.
También culinaria es la oferta de los talleres de cocina en los que además de aprender a cocinar, uno acaba degustando su obra y llevándose a casa algún que otro producto para llenar la nevera sin gastar nada de nada. Eso sí, hay que esperar 6 meses para poder repetir.
Con el estómago lleno es el momento de cuidar nuestra higiene bucal y Madrid ofrece también opciones para hacerlo más llevadero. En la facultad de Odontología de la Universidad Complutense más de 300 estudiantes tutelados atienden a todo tipo de pacientes preocupados por su dentadura y su bolsillo, pues aquí pueden hacerse los tratamientos a mitad de precio.
Pero también libros por la voluntad, cine sin pagar, recorridos gratuitos por el Madrid más desconocido, e incluso la posibilidad de alojarse gratis, como la que ofrece María Rosa, una jubilada de 82 años que comparte piso con Edith, una joven estudiante peruana que no paga alquiler a cambio de hacerle compañía y cuidarla.
