Javier Blanco , uno de los arquitectos del Centro Cívico Bailarín Vicente Escudero de Valladolid, se ha llevado una sorpresa cuando el ayuntamiento ha decorado una fachada sin avisarle. Les acusa de no respetar la propiedad intelectual.

El arquitecto no sabía que el ayuntamiento pensaba pintarlo y que se ha enterado por Redes Sociales. Asegura que la obra ataca su derecho a la propiedad intelectual.

La fachada del Centro Cívico Bailarín Vicente Escudero de Valladolid ha servido de lienzo para la realización de varios grafitis por parte del Ayuntamiento. Según Javier, en ningún momento se pidió permiso a los arquitectos.

En la fachada se esconden dos proyectores que exhiben imágenes en esa pared en la que ahora hay un grafiti. Por tanto, el ayuntamiento podría estar atentando contra la Ley de Propiedad Intelectual ya que se ha desnaturalizado parte de la obra.

Desde el ayuntamiento alegan que han procurado mantener la sensibilidad de los espacios en los que se realizaban los grafitis y respetar a las personas a las que afectaban.

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