¿EXISTE LA SUERTE EN EL ÉXITO? o eres más del pensamiento que la suerte nos la creamos nosotros mismo
Existe un pensamiento muy popular que afirma: "La suerte es donde la preparación se encuentra con la oportunidad", o "No existe la suerte, solo existe el trabajo duro". Además, no podemos dejar de mencionar una creencia que se ha popularizado recientemente: "Yo mismo creo mi suerte". Todo esto me lleva a plantear una gran pregunta: ¿Qué tanto influye la suerte en el éxito de una persona? ¿Es solo una táctica propagandística de los gurús de autoayuda o realmente la suerte tiene un gran impacto en nuestro éxito financiero y en nuestra vida?
Acompáñame en este video a explorar cuánto influye la suerte en nuestra cuenta bancaria. Y si tienes alguna anécdota en la que la suerte haya contribuido a incrementar tu patrimonio, espero tu comentario.
Existe un sesgo importante conocido como "sesgo egocéntrico". Este sugiere que, al alcanzar el éxito y mirar hacia atrás, tendemos a creer que nuestro triunfo es producto exclusivamente de nuestro arduo trabajo, dedicación y preparación. La mayoría de las personas cree que realiza la mayor parte del trabajo. Por ejemplo, al preguntar a los autores de artículos coescritos qué porcentaje del trabajo realizaron, la suma de sus respuestas superó el cien por ciento. La gente suele sobreestimar sus propias contribuciones y subestimar las de los demás.
¿Pero por qué ocurre esto? Sucede porque tendemos a recordar con más detalle todo lo que hacemos, pero no necesariamente lo que hacen los demás. Este sesgo puede hacer que subestimemos la influencia de otros factores en nuestras vidas, como nuestra "amiga" invisible e incomprendida: la suerte.
Tomemos a los futbolistas como ejemplo. Si bien muchos atribuyen su éxito a su arduo trabajo y determinación, factores como el lugar y el mes de nacimiento también son cruciales en su carrera profesional.
Uno. Efecto de la localización geográfica: Un estudio de la Universidad de Oxford reveló que los jugadores que nacen cerca de clubes de élite tienen más posibilidades de convertirse en profesionales, gracias a la accesibilidad a mejores entrenamientos y recursos desde una edad temprana.
Dos. Efecto de la fecha de nacimiento: Al igual que en el hockey, el fútbol presenta un fenómeno conocido como "Efecto de la edad relativa". Un estudio publicado en el "Journal of Sports Sciences" indica que los niños nacidos en los primeros meses del año tienen más oportunidades de ser seleccionados en academias de fútbol, debido a las fechas de corte para las categorías por edades. Estos niños, al ser mayores que sus compañeros nacidos más tarde en el mismo año, tienden a tener un mejor rendimiento físico y habilidades, otorgándoles una ventaja competitiva.
La suerte desempeña un papel significativo en muchos aspectos de nuestra vida, y la investigación científica lo respalda. Un estudio de la Universidad de Harvard en dos mil dieciocho sugiere que el lugar de nacimiento es crucial para las oportunidades vitales de una persona. Un informe del Banco Mundial indica que casi la mitad de la variación en los ingresos mundiales se debe al país de origen. De igual manera, una investigación en el "Journal of Economic Perspectives" muestra que nacer en un país próspero, como Noruega o Suiza, aumenta las posibilidades de tener una vida acomodada en comparación con nacer en naciones en desarrollo. Estas circunstancias, a menudo fuera de nuestro control, evidencian que, más allá del esfuerzo o habilidad individual, la suerte relacionada con el lugar de nacimiento puede impactar en el destino de una persona. Sin embargo, muchas personas exitosas tienden a atribuir su éxito exclusivamente a su esfuerzo y destrezas, minimizando el papel de la suerte. Esta perspectiva puede hacerlos menos propensos a ser generosos y a devolver algo a la comunidad.
Pero, ¿cuánto influye la suerte en nuestro éxito?
Esta pregunta tiene múltiples respuestas y depende de cada experiencia y vivencia. Sin embargo, desde mi punto de vista, la suerte existe, y no tengo dudas al respecto. Desde el lugar en que nacemos, los padres que nos tocan, hasta la educación que recibimos, la suerte está presente. Y, aunque la suerte tiene una gran influencia en nuestros primeros años de vida, lo más importante es saber reconocerla, valorarla y aprovecharla. La preparación, el trabajo duro y la actitud son esenciales para identificar las oportunidades que la suerte nos brinda y sacarles el máximo provecho.
Todos estamos expuestos a la suerte. La diferencia radica en nuestra capacidad para reconocerla y aprovecharla al máximo.
Si deseas tener éxito en un mundo donde la suerte tiene un papel relevante, es fundamental creer en tu talento y esfuerzo, pero también reconocer la suerte que has tenido y recordar que, al alcanzar el éxito, debes hacer lo posible por ayudar a otros.
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