“Púrpura las velas, y tan perfumadas, que los vientos estaban enamorados de ellas”, escribió Shakespeare. Se dice que Cleopatra recibió a Marco Antonio en un barco con velas perfumadas después del asesinato de Julio César y se convirtió en reina de Egipto. El uso del perfume se asocia principalmente con el misterio, la fantasía y la imaginación. Usamos perfume para complacer a los demás, para dejar una buena impresión, para rodearnos de un aroma agradable y persistente. Aunque el perfume tiene una larga historia, no siempre ha tenido un toque de romance.

La historia del perfume es interesante, compleja e intrínsecamente ligada al desarrollo de la sociedad humana en todo el mundo.

El primer uso registrado de 'perfume' se remonta a cuando las culturas antiguas quemaban incienso y disfrutaban de los agradables aromas resultantes.

Perfume como nombre tiene su origen en la frase latina 'per fumus' que se traduce como "a través del humo". Aunque, más tarde, los franceses también inventaron el término 'parfum' para describir la quema de incienso para producir una fragancia.

Esta historia del perfume en las civilizaciones antiguas comenzó como una ofrenda a los dioses porque se pensaba que causaba la sublimación del cuerpo para hacerlo más como un dios. El primer uso registrado de ‘perfume’ es cuando los mesopotámicos descubrieron por primera vez el incienso hace 4000 años. De hecho, la primera forma de perfume fue el incienso. Las culturas antiguas quemaban una variedad de resinas y maderas en sus ceremonias religiosas. El incienso llegó a Egipto alrededor del año 3000 a.C. pero hasta el comienzo de la Edad de Oro de Egipto, los perfumes se usaban solamente en rituales religiosos. Estuvieron disponibles para todos los egipcios a medida que los sacerdotes renunciaron gradualmente a sus derechos exclusivos. Los ciudadanos tomaban baños elaborados y empapaban su piel en aceites perfumados por placer.

Los antiguos griegos pueden atribuirse el mérito del primer perfume líquido. Pero fue el desarrollo de la destilación por parte de los árabes lo que hizo viable la fabricación de perfumes.

A lo largo de las civilizaciones antiguas, el interés por los ingredientes aromáticos creció exponencialmente, al igual que la variedad de sus aplicaciones. Ricos y pobres por igual pudieron hacer uso de inventos como licores fermentados, fumigaciones, bálsamos e incluso aceites en un intento de sentirse más cerca de sus dioses.

Se cree que este es el primer período en la historia del perfume en el que se estableció una fuerte asociación entre fragancia, belleza y poder.

Aunque, en los años que siguieron, esta estimada asociación caería en decadencia. En contraste con sus asociaciones sagradas anteriores, los perfumes se convirtieron más tarde en la quintaesencia de las orgías más estridentes.

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