Bello – Antioquia.
Según la información, esta situación se presentó el jueves 27 de septiembre en el vecino municipio de Bello en un barrio denominado El Trapiche donde gracias al llamado de la ciudadanía, varios agentes de la Policía Nacional acuden y atienden un caso donde un sujeto con “garrote” y “machete” en mano se encontraba atacando a los vecinos y transeúntes de este sector.

De inmediato los agentes intentan desarmar a este individuo que al parecer se encontraba bajo efectos de alcohol y/o sustancias ilegales y por este motivo se había convertido en una total amenaza para la comunidad.

Por consiguiente en el intento de desarmar y arrestar al sujeto, este logra desenfundar una de las armas de dotación de uno de los policías y con esta alcanza a realizar algunos disparos por los cuales uno de los agentes de Policía cae herido y es llevado por sus compañeros y ciudadanos hacia un hospital.

Así lo reportó en su cuenta en Twitter la RED de Aliados REDAPVAL Medellín:
“Reportan que este hecho sucedió en #Bello el fin de semana, donde el capturado le quitó el arma de dotación al uniformado y dispara contra la integridad de los policías.”

El periodista Juan Camilo Holguín del canal Telemedellín participó en la entrevista que dio el señor General Carlos Rodríguez, comandante regional 6 de Policía donde dio a conocer detalles de este procedimiento y confirmó que el estado de salud del agente de Policía es estable.

General Carlos Rodríguez:
“Desarmarlo causándole el menor daño posible teniendo en cuenta que con esa arma blanca perfectamente puede generar la muerte de otro ciudadano.”

“No podrían usar nuestros uniformados su arma de fuego.”

Este lamentable caso nos genera varias inquietudes que incluso el mismo General Rodríguez en sus comentarios trata de evidenciar que este individuo en el estado en que se encontraba y con esa actitud amenazante, era un total peligro para la comunidad pero que sus uniformados no pueden usar el arma de fuego.

Como podemos observar en el vídeo, los agentes de Policía usan desde sillas, palos y el bastón de mando para tratar de inmovilizar a un sujeto que tiene un gran machete y garrote.

Es inconcebible que la integridad de un delincuente este por encima de la vida de los ciudadanos víctimas y de los mismos agentes de Policía que acuden para dar solución.
Aquí la crítica no es para la Policía como institución ni mucho menos para sus integrantes, es de conocimiento que ellos cumplen órdenes y deben seguir el estricto protocolo para los diferentes casos que se presentan, pero es importante analizar y replantear nuestras actuales leyes y procedimientos.

En países civilizados y de primer nivel este tipo de casos si se llegasen a presentar, su desenlace sería fatal para aquel que incumple las normas de convivencia o irrespeta a la autoridad, preservando y teniendo como prioridad la vida e integridad del ciudadano de bien.

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