Lo que crees, lo creas. Nos lo cuentan los clásicos griegos, la literatura, las culturas orientales e incluso los cuentos.

Hablar a tu hijo (o a ti mismo) con unas palabras determinadas, es hacer un "presagio" de una manera de ser tanto en negativo como en positivo: eres tonto, eres estúpido... o incluso, eres inteligente, eres honrado... lo dirige a actuar de tal manera y como consecuencia a SER de esa manera.

Los cuentos de tradición oral, como este de los Hermanos Grimm, "Los tres pelos de oro del diablo", nos cuentan con personajes, acciones, y lugares, es decir con símbolos, una historia para que podamos darnos cuenta, y tomar conciencia de nuestra manera de actuar. ¿Por qué actuamos como lo hacemos? Es por una profecía, la profecía autocumplida.

Y si lo sabemos, podemos cambiarlo y vivir mucho mejor sin las limitaciones de nuestros programas inconscientes. Y PARA QUE ESTE CUENTO SEA EFECTIVO, puedes escucharlo antes de acostarte. Te dormirás profundamente porque las palabras te guiaran para una gran relajación y tu inconsciente va a recoger el mensaje sin ninguna dificultad.

También te invito a que visites mi canal de Cuentos con Marta y los compartas con los que más quieres.

¡Gracias!

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